Chihuahua, Chih, 05 de septiembre 2020
En su mensaje de apertura de los trabajos de la Reunión Interestatal COVID-19 que se celebra al interior del Palacio de Gobierno y en la que los gobernadores de la denominada Alianza Federalista definirán su permanencia o no en la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), el gobernador de Chihuahua, Javier Corral Jurado, arremetió con dureza contra el presidente Andrés Manuel López Obrador acusándolo de atizar la división nacional, descalificar la pluralidad, aumentar el centralismo y acabar con el federalismo. Es por ello que aseguró que ante “el miedo, la ausencia o la incapacidad de la oposición en su conjunto y el aletargamiento de otros contrapesos institucionales y sociales”, la Alianza Federalista se había erigido como el contrapeso necesario del Gobierno Federal y abordaría hoy la pertinencia o no de seguir en la Conago al haberse convertido ésta en una “entelequia” que ha perdido el fin y el sentido para el que nació.
Corral inició celebrando que los integrantes de esta alianza se reunieran en Chihuahua “que ha sido titular de memorables gestas en favor de la libertad y de la democracia”, destacando que celebraban su reunión en un lugar histórico de México, que es sede del Altar de la Patria, el lugar exacto donde fue fusilado Don Miguel Hidalgo y Costilla.
“Ahora que la Alianza se reúne en Chihuahua es propicio recordar esto, porque como nunca en nuestra historia política y social como país México requiere ser la síntesis de todos los esfuerzos y en la diversidad de posturas, en la pluralidad de las concepciones, encontrar el complemento que hace el todo”, refirió el mandatario estatal chihuahuense.
“A diferencia de ese anhelo, hoy al país se le quiere despedazar, ya cuesta mucho a México la manera en que se atiza la división nacional y se clasifica a los mexicanos según se coincida o no con lo que dice o hace el Gobierno Central”, aseveró.
Destacó la pluralidad que existe al interior de la Alianza Federalista, pero también la predisposición que existe para dialogar en torno a los temas que son comunes a los estados y se había constituido como un gran espacio para exponer y confrontar las ideas y propuestas para afrontar las crisis sanitaria y económica derivadas de la pandemia del COVID-19.
Aseguró que “muchas personas en el país tienen puestos sus ojos en este esfuerzo de la Alianza Federalista ante el miedo, la ausencia o la incapacidad de la oposición en su conjunto y el aletargamiento de otros contrapesos institucionales y sociales, diversos sectores ven con esperanza que aquí se genere un contrapeso y equilibrio, por lo menos en la relación de los estados con el Gobierno Federal ante su dinámica creciente de reconcentración de poder”.
Es por ello que consideró muy importante que era muy importante que la Alianza, además de analizar el tema del COVID-19 y sus consecuencias, también abordara la crisis política “que ya se dibuja con toda claridad en el país. Ello resulta urgente pues, tal como he señalado otras ocasiones, la contingencia que vivimos ha sido un detonador que nos ha mostrado lo mejor de las personas, pero también lo peor de los sistemas políticos, de los regímenes de gobierno y de los líderes políticos”.
“Es momento de analizar seriamente el papel que los gobernadores jugamos en el destino de México y para ello revisar la eficacia práctica y funcionamiento de la Conferencia Nacional de Gobernadores y por supuesto decidir sobre la pertinencia de permanecer en ella o poner fin a nuestra participación pues ha quedado en evidencia que el mecanismo ya no cumple la función para la que nació, como un espacio de deliberación para defender el federalismo y la soberanía de los estados”, enfatizó Corral.
Recordó que entre sus principios estaban los de impulsar un proceso de descentralización y fortalecimiento del federalismo, pero sin embargo la Conago perdió fuerza y “hoy ni siquiera funciona como un mecanismo de diálogo eficaz y útil, se convirtió, como lo he mencionado en anteriores ocasiones, en una entelequia que fue mermada por el reparto discrecional de los recursos federales”.
Aseguró que el objetivo de los integrantes de la Alianza Federalista no era el de atizar la crispación y la división política “como se hace a diario desde la tribuna de las mañaneras, pero sí alertar, llamar a la reconsideración ante legítimas preocupaciones derivadas de acciones e intentonas que parecen desandar el camino del federalismo, los avances institucionales y democráticos, así como las libertades que la ciudadanía ha conquistado”.
A este respecto, manifestó que en su concepción más amplia la democracia era no solamente una estructura jurídica y un sistema político, sino un sistema de vida fundamentado en el constante mejoramiento del pueblo, por lo que no cabía la exclusión de los contrarios o la pluralidad política.
A casi dos años del Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador “se vuelven desafortunadas las declaraciones constantes donde la oposición aparece como un enemigo a vencer. Es válido, por supuesto, defender posiciones y convicciones, lo que no está bien es desdeñar y descalificar a quienes no piensan como él”.
“Sin embargo, desde Palacio Nacional se ha lanzado una y otra vez lo que pareciera ser una advertencia tajante, estás conmigo o contra mí, y eso termina por amenazar las libertades de expresión y al disenso”, agregó Javier Corral, apuntando que la unidad nacional no debía darse nunca en torno a la figura del presidente sino de las instituciones democráticas que dan forma y contenido a la República de México.
Refirió que desde el inicio del sexenio no sólo habían sido objeto de descalificaciones los adversarios políticos, empresarios y medios de comunicación, sino también a las instituciones que habían contribuido al fortalecimiento de la democracia mexicana y de desacreditación constante de órganos autónomos o descentralizados, la intención de concentrar atribuciones, las imposiciones y nombramientos oscuros, el manejo a modo en la impartición de justicia,…
Cabe recordar que en la reunión de hoy en Chihuahua participan los gobernadores de Durango, Dr. José Rosas Aispuro; Jalisco, Ing. Enrique Alfaro Ramírez; de Michoacán, Ing. Silvano Aureoles Cornejo; de Tamaulipas, Lic. Francisco Javier García Cabeza de Vaca; el Lic. José Ignacio Peralta Sánchez, del estado de Colima; Ing. Miguel Ángel Riquelme Solís, de Coahuila; Ing. Jaime Heliodoro Rodríguez Calderón, de Nuevo León y Lic. Diego Sinhué Rodríguez Vallejo, gobernador de Guanajuato.
Además del combate a la pandemia de COVID-19 y las estrategias para mitigar su impacto económico, el otro gran tema que abordarán los gobernadores es el de la urgente reforma a la Ley de Coordinación Fiscal.
